Melva; en el siguiente texto espero que encuentres la respuesta para saber como diferenciar un pensamiento de Dios de una nuestro....
"Jehová conoce los pensamientos de los hombres, que son vanidad". Salmos 94:11
Una de las batallas mas cruentas y constantes que libramos los Cristianos comprometidos con Jesús, es la batalla de la mente, disfrazada de pensamientos. Esta batalla es librada con el fin de obtener el control sobre la mente de los individuos. Día y Noche, el enemigo está bombardeando nuestros sentidos, las puertas de los Ojos y los Oídos, tratando de entrar en nuestra mente, y de ahí bajar al corazón y corromperlo. Cuando los pensamientos, vamos a llamarles "semillas" que Satanás siembra en nuestra mente, los regamos con afirmaciones o negaciones, los estamos alimentando y esta semilla crecerá y bajará a nuestro corazón. El único fin de Satanás es corromper el corazón, pues el sabe perfectamente bien que del "Corazón emana la vida" (Proverbios 4:23). Si el cuerpo es corruptible y todos sabemos que el cuerpo es algo que tarde o temprano dejará de funcionar, la vida se encuentra en el Espíritu que vivirá o morirá eternamente según lo que almacenemos en nuestro Corazón.
"No comas pan con el avaro, ni codicies sus manjares; Porque cual es su pensamiento en su corazóm, tal es él." Proverbios 23:6-7
En pocas palabras, SOMOS LO QUE PENSAMOS Y LO QUE PENSAMOS ESTA EN EL CORAZON. Si del corazón emana la vida, debemos cuidar nuestros pensamientos que pueden dar la vida o la muerte al corazón.
Muchos Cristianos pecamos en nuestros pensamientos. Esto puede ser creyendo los pensamientos negativos que Satanas pone en nuestra mente, respecto a personas o situaciones, y dejándonos convencer por el. También, cuando revivimos experiencias pecaminosas del pasado, o planeamos acciones que sabemos son malas. Todo aquello que quiera traernos el pasado pecaminoso al presente, NO PROVIENE DE DIOS, pues Dios ya nos perdonó esos pecados y los arrojó al fondo del mar. El único que quiere recordarnos el pasado es Satanás: Si satanás te recuerda el pasado, tu recuérdale su futuro: El ya fué vencido y no tiene parte ni suerte en tu vida, y su futuro es el Lago de Fuego y azufre.
Dios discierne los corazones y los pensamientos y juzgará tanto los pensamientos que guardamos en el corazón, como las palabras que emanan de nuestra boca y las acciones que hacemos.
Job hizo una confesión que se aplica a todos nosotros: "Yo conozco que todo lo puedes, Y que no hay pensamiento que se esconda de tí.¿Quién es el que oscurece el consejo sin entendimiento? Job 42:2-3
El Rey David pidió: "Crea en mí, Oh Dios, un corazón limpio; y renueva un espíritu recto dentro de mí". Salmos 51:10
Todos libramos la batalla de los pensamientos, pero nosotros los Cristianos comprometidos con Jesús tenemos a Dios de nuestro lado, quien, si se lo pedimos, renovará un espíritu recto dentro de nosotros, y creará un corazón limpio en nosotros. El corazón limpio tiene que ser Creado por Dios, pues por cuanto todos pecamos, todos nacemos con un corazón dispuesto a ser contaminado y Satanás no desperdicia cuanta oportunidad tiene para destruirnos. Solo Dios puede Crear en nosotros un corazón limpio, si se lo pedimos. Cuando esto ocurre, tenemos que librar la batalla para que los pensamientos que Satanas sigue lanzando como dardos, no bajen al corazón y lo contaminen de vuelta.
"Yo (Jesús) os digo, que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en el corazón" Mateo 5:28
Tenemos que aprender las tentaciones entran al cuerpo por medio de los sentidos. Gusto, oído, vista, tacto y olfato despiertan en nosotros pensamientos. Si por medio de la vista entra un pensamiento pecaminoso, y no lo reprendemos en el nombre de Jesús, ese pensamiento ya contaminó nuestro corazón. Para poder distinguir la diferencia entre nuestros pensamientos, y la voz del Espíritu Santo, de las semillas de Satanás, Dios nos dejó su Palabra. Con la Palabra de Dios nosotros podemos defendernos y atacar y reprender al enemigo.
"Porque las armas de nuestra milicia no son carnales,sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas,derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando TODO PENSAMIENTO CAUTIVO A LA OBEDIENCIA A CRISTO" 2 Corintios 10:4 y 5
Satanás, desde el principio, ha utilizado nuestros sentidos para extraviarnos, y sigue haciéndolo ahora. Todo pensamiento que no proviene de Dios, y al que alojamos en nuestra mente y permitimos que baje al corazón, nos separa de Cristo morando en nuestro corazón. Las consecuencias de esto es la separacion de nosotros con Dios, pues el único intermediario entre Dios y nosotros es precisamente JESUCRISTO morando en nosotros. La serpiente lo sabe, por eso quiere contaminar nuestro corazón.
"Pero temo que como la serpiente con su astucia engañó a Eva, vuestros sentidos sean de alguna manera extraviados de la sincera fidelidad a Cristo" 2 Corintios 11:3
Tenemos solamente dos opciones: Pensar lo bueno o pensar lo malo. De toda situacion que se presente en la vida cotidiana, podemos extraer lo bueno o extraer lo malo. Esa es nuestra desicion y depende enteramente de nuestra voluntad. Si decidimos extraer lo malo, entonces Satanas no desaprovechará la oportunidad para bombardearnos con semillas que darán sus frutos que contaminan el corazón. Pero si escogemos extraer lo bueno, por poquito o casi nulo que esto sea en la situación que enfrentamos, estamos ganando la batalla de nuestra mente en forma de pensamientos. Pablo nos instruyó: "Todo lo que es verdadero, todo lo honesto, lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre, si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, EN ESTO PENSAD".Filip 4:8
Si podemos ganar la batalla que se libra en nuestra mente, por medio de los pensamientos, llevaremos una gran ventaja en las pruebas que se presentan cada día. Esto es imposible lograrlo si no nos remitimos a la Palabra de Dios, la estudiamos y memorizamos, y sin la ayuda de Jesucristo por medio del Espíritu Santo. Solo entonces podemos discernir los pensamientos que Dios tiene de nosotros, y vivir la vida de Victoria en Victoria, venciendo al mal con el bien.
"Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de ustedes, dice Jehová, pensamientos de PAZ y no de MAL, para daros el fin que esperaís" Jeremías 29:11
En Cristo Jesús tenemos la Victoria.
A El sea la honra, honor, alabanza y poder.
Tomado de cristianosunidos.com
