En Exodo 4:1-2 leemos:
Alguien dijo:
Muchas veces deseamos hacer cosas grandes y en otras ocasiones simplemente hacer cosas pequeñas, pero suele suceder en la vida que estos anhelos parecen no prosperar y no vemos resultados como queriamos… ¿Cómo seguimos con nuestros proyectos en esos casos?
En Mateo 13:57 vemos que El Señor dijo en respuesta a la incredulidad de la gente de Nazaret: ¨No hay profeta sin honra, sino en su propia tierra y en su casa¨
El Señor Jesucristo vino a este mundo con una Misión extremadamente grande… este Plan estaba elaborado desde la Eternidad… pero estando entre Su Pueblo fue rechazado…
¿Qué hizo Jesús? ¿Retornó a la Patria Celestial? ¿Se frustró y cambió Sus Objetivos?... por supuesto que no, El tomó lo que tenía en Su Mano e hizo lo necesario hasta completar la Obra…
En Mateo 21:43 encontramos que El Señor dijo a quienes ¨no le recibieron¨…
Gracias a esta Voluntad del Señor, independiente de las circunstancias que le tocaron vivir durante su vida terrenal, todos los que confiamos en El podemos disfrutar de la Salvación y la Esperanza en la Vida Eterna…
Recordemos: Si lo que debemos hacer es lo que Dios desea para nuestras vidas, sigamos adelante, aunque los destinatarios, los resultados o el fin mismo de lo que haremos parezcan cambiar